¿Si mi expareja no paga su parte de la hipoteca me pueden echar de casa?
En los divorcios o separaciones la situación más habitual que encontramos es la de que ambos
cónyuges o miembros de la pareja convivían en un domicilio que en su día fue adquirido mediante préstamo
hipotecario y antes de terminar de pagar todas las cuotas de la hipoteca deciden divorciarse o cesar la convivencia.
Por ello, se pacta o se acuerda por el Juez el pago de la hipoteca por mitad (o a partes desiguales) y una de las partes,
generalmente el que tenga la guardia y custodia de los menores, se queda en el domicilio.
Esta situación puede derivar en un grave problema si el cónyuge que no se ha quedado con la
casa deja de pagar su parte de la hipoteca, bien sea porque no quiere o porque no puede
pagarla. Es entonces cuando se plantea una duda razonable. ¿Puede el banco echarme de casa
si mi expareja no paga su mitad de la hipoteca, a pesar de que yo he cumplido religiosamente
con todas las cuotas del préstamo?
La respuesta es, por desgracia, que sí. Si uno de los ex cónyuges o ex miembros de la pareja deja de pagar su parte de la
hipoteca, dado que no se está cumpliendo con la totalidad de la obligación, el Banco está en su
derecho de demandar a ambos e iniciar una ejecución hipotecaria. La única excepción seria si
se hubiera inscrito antes de la hipoteca un derecho de uso atribuido en sentencia,
pero eso será objeto de otro post.
Debe tenerse en cuenta que el pago de la hipoteca corresponde a quienes figuran como
deudores hipotecarios en la escritura de la hipoteca. Los pactos o resoluciones judiciales que
dividan la carga de pagar la hipoteca entre la expareja son válidos, pero sólo pueden tener
efecto entre los miembros de la pareja. Es decir, para el Banco es irrelevante que quien vive en
el domicilio haya estado pagando, o que se haya pactado o acordado en sentencia que la
hipoteca corresponde pagarla a uno sólo de ellos. Salvo que se alcance un acuerdo con el
Banco, a sus ojos la pareja sigue estando obligada a pagar la hipoteca en su totalidad y a
sufrir las consecuencias de no hacerlo.
Si usted se encuentra en esa situación hay varias opciones. Una de ellas es, si su economía se
lo permite, pagar usted la totalidad de la cuota, y luego reclamarle a su expareja la cantidad
que ha pagado de más (es decir, la otra mitad). Esto se conoce como acción de repetición.
Asimismo, el que deja de pagar su mitad del préstamo hipotecario puede estar incurriendo en
un delito de abandono de familia del artículo 227 del Código Penal si queda acreditado que
dispone de recursos suficientes para el pago. Esta posibilidad ha sido admitida, por ejemplo
por la Junta de Magistrados de las Secciones Penales de la Audiencia Provincial de Madrid de 9
de enero de 2018 (puede ver un estudio completo de este delito aquí). Si bien hay que admitir que no existe unanimidad al respecto, y algunos
tribunales consideran que el impago de la hipoteca no constituye delito. En cualquier caso, denunciar este delito no impedirá
la ejecución hipotecaria, tan sólo servirá para recuperar el dinero pagado de más y castigar al incumplidor.
Otra posibilidad es, si la sentencia de divorcio o separación contemplaba expresamente la
obligación de pagar cada uno una parte de la hipoteca del domicilio familiar, instar una
demanda de ejecución de sentencia. Una vez se admita a trámite la demanda, se averiguará el
patrimonio del incumplidor y se le embargarán las nóminas y cuentas corrientes, entre otros
bienes. Las cantidades embargadas se le entregarán al cónyuge perjudicado, siempre que éste
haya empezado a pagar la mitad que correspondía al otro ex cónyuge. Esta posibilidad también
ha sido objeto de controversia, ya que algunos tribunales consideran que el impago de la
hipoteca no se puede ejecutar por esta vía, pues el acreedor es la entidad bancaria y no el
cónyuge ejecutante (por ejemplo la Audiencia Provincial de Jaén, en auto de 8 de enero de
2015). Aunque esta es la tesis minoritaria.
En LEGEM Abogados somos Abogados especialistas en divorcios. Si tiene alguna consulta o
necesita ayuda en este tipo de cuestiones o sobre cualquier tema de familia no dude en
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